martes, 4 de enero de 2022

TE SUEÑO

 




             TE SUEÑO

                     Oscar Carrasquel


En la noche más larga 

apareces tu en esta historia

El dormitorio desierto sin ti.

Como la rosa más bella 

de una noche nebulosa

la luna abre su faz 

en su fantástico paseo

Hay noches que sueles venir 

desde tu arcana lejanía

Entonces abres mis parpados

para que sueñe despierto

No traes nada de particular

sino un regalo dadivoso del alma

Yo soy demasiado soñador  

puedo ver en la tiniebla

con la fuerza viva de los jaguares.


                                             Oscar Carrasquel. La Villa de San Luis, enero 2022

 

   

lunes, 3 de enero de 2022

ISMAEL CARRIZALES "CORREITA"

                    Foto propiedad de Editorial Miranda.. Retocada por Ramón Alfredo Corniel


  "CORREITA"


Por Oscar Carrasquel




En las calles solitarias
de La Villa de San Luís
frescas están todavía
las huellas de sus pisadas,
 
En invierno como en verano,
en los crepúsculos de los ocasos

¿Quién no supo de sus afanes
por la senda de sus calles 
tantas veces que lo vimos trajinar?

Pasaba con una ruma de periódicos 
del vespertino "El Mundo" 
tendidos sobre su humanidad

Estiraba rápido, 
la mano al máximo,
para entregarlo
por donde quera que pasaba

Medio real costaba "EL Mundo"

Lucía el rostro redondo de la luna 
y una voz acogedora,
melodiosa, sonora.

Sonrisa de alegre muchacho,
Cargaba un sombrero de cogollo.
Encerrado en unos pantalones 
más anchos que las campanas de la iglesia

Repartidor al voleo
de invitaciones para entierros 
y de volantes de la iglesia

Más y más primicias en su voz
con alusión regional y nacional,
le oyeron los portales de las casas 
pregonar

Su voz fuerte se escucha a lo lejos
bajo el límpido azul del cielo
por el tragaluz de la calle principal

--¡Cayó la dictadura y el tirano
a  Dominicana  fue a parar!

 !El Mubdo! !El Mundo!

Aquel 23 enero de 1958
deslizaba los tubazos 
del vespertino de la Capital.

Una mañana de sol matinal
la primicia por el pueblo corrió,
y por todos los ámbitos se oyó 

Que en un  ataúd  sin desmayo
por el  sendero de la calle Real 
llevan a “Correita” a enterrar
al camposanto municipal.

Hoy devuelvo atrás la mirada,
la nostalgia me conmueve,
me dan ganas de llorar
con un gemir lastimero.

Descorrieron muchas lágrimas
asomadas por el vecindario
como caudal de río crecido.

Aún se oye su pregón resonar
por las calles de su pueblo natal
!EL MUNDO!..!.EL MUNDO!..


                                          

                                 La Villa de San Luis, abril 2017


LUCIO LÓPEZ "PATETURCA" EL ENTERRADOR

 

                                                   Ilustración del pintor Carlos J. Martínez "Cejota"


    



"PATETURCA" EL ENTERRADOR

                              Oscar Carrasquel

Lentamente desmaya la tarde
y sobre  el paisaje de La Villa
la muerte asecha

La calle del medio 
con su sepulcral silencio
derramando miedos

!Alguien se habrá muerto!
La muerte 
Es como una rueda que no tiene fin

Pasa de prisa el entierro.. 
sin flores, sin dobles de campana,
sin lloros, ni acompañamiento

La sombra de los aleros 
de los antiguos caserones
ganan espacio sobre la acera

Cae un rayo de sol alto,
moribundo,  
sobre el macadam.

El sudor le rueda por el rostro 
En oscura su tez, .
Pies elefancíacos descalzos, 
Ronca la voz,
Ancha la espalda, 
De paltó y sin franela.

Tarda  el hombre en avanzar
¡Chas… Chas… Chas…!
rueda como  un coche fúnebre 
de carne y  huesos.

Su tétrica misión?  
trasladar difuntos sin mortaja 
dentro de cuatro tablones .

Desde el hospital Santo Domingo
hasta el camposanto 
es el itinerario desplegado.

Duro para mirar 
tanta veces a la muerte

Duro
para acariciar la muerte
tantas veces con las manos 

Pobres de solemnidad.
Para ellos no hay salones velatorios,
Ni cortejos. 
Ni redoble de pasos.

Las Casas de Abastos   
entrejuntan los portones, 
cierran sus puertas,
mientras dura el paso del fantasma
con su fúnebre carga.

El transeúnte (conmovido) 
detiene la marcha, 
se despoja del sombrero
y se hace la cruz en la frente.
.
El mundo infantil 
frunce su ceño esquivo.

La “recta final”,  
la calle El Comercio
queda empañada de licor, 
de soledad y silencio.

Lucio “Pateturca” 
se aleja íngrimo por la calle 
con la penúltima carga del día
.
El pesado cajón se deja abrazar
y sobre su hombro izquierdo 
lo pone a descansar.

El fúnebre enterrador 
ya pisa el cementerio.
Busca entre cruces y tumbas
el surco y la bóveda sola

Plantar los despojos a ras 
para él no es nada.

El mendigo de ojos enrojecidos 
se retira con risa férrea,
livianito el cajón 
a buscar otras muertes.


          La Villa de San Luis, invierno 2016